Fibra de PVA (alcohol polivinílico)

Las fibras de PVA (alcohol polivinílico) son fibras de refuerzo de alto rendimiento para hormigón y mortero. Las fibras de PVA son adecuadas para una amplia variedad de aplicaciones debido a sus propiedades superiores para combatir las grietas, su alto módulo de elasticidad, su excelente resistencia a la tracción y la unión molecular y su alta resistencia a los álcalis, los rayos UV, los productos químicos, la fatiga y la abrasión. Las fibras de PVA son únicas en su capacidad de crear un enlace molecular con mortero y hormigón que es un 300% mayor que otras fibras.

Se trata de fibras monofilamento que están disponibles en 3 longitudes y diámetros de filamento diferentes.

Debido a la naturaleza fina de estas fibras y al hecho de que se dispersan en fibras monofilamento, es menos probable que sean visibles en las superficies acabadas. Su visibilidad entre sí es directamente proporcional a sus distintos diámetros (7 es el menos visible, 100 es el más visible). Igualmente cierto es que cuanto más pequeña es la fibra, cuantas más fibras hay para una determinada unidad de medida, más probabilidades hay de que ahoguen las mezclas en dosis más altas. Por lo tanto, los PVA100 se dosifican a tasas más altas en las mezclas más fluidas que los PVA15.

Los PVA 100 se prefieren por su facilidad de trabajabilidad en comparación con los 7 y 15. Estas son las fibras de PVA más visibles en las superficies acabadas debido a su longitud. Ideal para usar en mezclas de concreto ECC fluido (SCC). Las fibras de PVA se pueden utilizar como medio primario o secundario para reforzar objetos de hormigón artesanales, incluidas encimeras de hormigón, elementos arquitectónicos de hormigón, muebles de hormigón y muchas otras aplicaciones.

Ficha de datos de seguridad (MSDS)